sábado, 11 de junio de 2011




Silencios abandonados...

Silencios abandonados…
Silencios abandonados en un segundo de pasión,
locuras increíbles al borde del gozo,
llantos de felicidad por tenerte amándome,
lagrimas de ternura corriendo por tus suaves mejillas.
Tus labios alborotados.
Tu piel de emoción.
Tus manos recorriendo mi cuerpo.
Tu cuerpo perdido en el placer.
Tu conmigo…yo en ti.
Este momento durara un segundo,
que no se acabara jamás…



Poema del Fracaso

Mi corazón, un día, tuvo un ansia suprema,
que aún hoy lo embriaga cual lo embriagara ayer;
Quería aprisionar un alma en un poema,
y que viviera siempre... Pero no pudo ser.
Mi corazón, un día, silenció su latido,
y en plena lozanía se sintió envejecer;
Quiso amar un recuerdo más fuerte que el olvido
y morir recordando... Pero no pudo ser.
Mi corazón, un día, soñó un sueño sonoro,
en un fugaz anhelo de gloria y de poder;
Subió la escalinata de un palacio de oro
y quiso abrir las puertas... Pero no pudo ser.
Mi corazón, un día, se convirtió en hoguera,
por vivir plenamente la fiebre del placer;
Ansiaba el goce nuevo de una emoción cualquiera,
un goce para el solo... Pero no pudo ser.
Y hoy llegas tu a mi vida, con tu sonrisa clara,
con tu sonrisa clara, que es un amanecer;
y ante el sueño más dulce que nunca antes soñara,
quiero vivir mi sueño... Pero no puede ser.
Y he de decirte adiós para siempre, querida,
sabiendo que te alejas para nunca volver,
Quisiera retenerte para toda la vida...
Pero no puede ser! Pero no puede ser!

viernes, 10 de junio de 2011

Dulces Lagrimas caidasen el agua





Dulces lágrimas caídas en el agua
Bailan al son de una guitara,
Se pierden en la nada vagando
Sin rumbo alguno.
Se cotejan con la luna
Emancipándose al pasar
Son como difuntos
Muertos todos ellos
Antes de nacer.


Revolotean en mi mente
Sin orden ninguno,
Toman el aliento
De un destino equivocado.


Caen como flores sin florecer.
Duelen en el corazón, en el alma también.
Muertas esas hojas no paran de caer,


Caen sin querer…


Como lágrima
Emanando de un alma
Difunta...
Cada una de ellas posee un nombre…


Un nombre digno de saber,
Una historia digna de contar
Y difícil de olvidar…


Una la llamo amistad,
Otra sinceridad
No me olvido de la pasión,
Ni tampoco de la traición.
Mis dulces lágrimas
Caídas en el agua
Van y vienen sin parar.
Son lágrimas derramadas.


Derramadas con pasión…