Una Sirenita de caracolas

Siempre me ha gustado el mar, nunca se me olvidara mi primer encuentro con él, tendría yo 6 años de edad y mis padres nos llevaron a pasar unas vacaciones al mar, ya cuando lo vi desde la carretera sentí algo raro dentro de mi corazón un sentimiento que todavía no logro descifrar cuando me baje y corrí a la playa el olor la espuma blanca el color azul todo eso era para mí un mundo nuevo un sueño en ese momento comenzó mi amor por el mar, un amor que nunca se ha roto, el me llama y yo lo busco, paso horas y horas a su lado le tiro flores, le hablo de mis cosas, me gusta sumergirme en el pero curiosamente no sé nadar fuera del mar solo dentro, y a veces no me doy cuenta de lo lejos que me voy y me da miedo ahogarme pues no sé nadar fuera, pero él me llama me atrae los peces me miran curiosamente y yo a ellos, un día me imagino que sería quedarme allá abajo y no regresar ya más, me da miedo pero después pienso y si me vuelvo un pez y no me muero quizás una sirena, y así seré libre y podre mirar todos los tesoros lindos que hay allá en ese otro mundo, y se me ocurre pensar existirán de verdad las sirenas, si es así yo quisiera ser una de ellas. Quien sabe…….